jueves, 17 de marzo de 2016

'Fronteras de Europa': una exposición para caminar con los refugiados

Cinco fotógrafos y cinco periodistas de 5W se unen para retratar el blindaje de Europa y contar las historias de los que huyen de la guerra y la pobreza


La primera exposición de 5W no podía tener otro tema. De la mano de Photon Festival, hemos inaugurado en el Museu Valencià d'Etnologia una muestra que recorre cinco coordenadas de la fortaleza europea (norte, sur, este, oeste, centro) y, sobre todo, camina con los refugiados.

Son más de cien imágenes, algunas de formato enorme, de cinco fotoperiodistas que tienen una relación íntima y de larga distancia con cada frontera. Y, sobre todo, es una exposición que enseña pero también dice: la denuncia, el lirismo y el contexto los dan cinco periodistas que escriben sobre las imágenes.

La valla de Melilla, la primera frontera explorada en la exposición de 5W.Gianfranco Tripodo 
 Es la frontera de la que menos se habla ahora, pero una de las más fortificadas y que más sufrimiento ha visto. El fotógrafo Gianfranco Tripodo, que lleva años trabajando allí, nos traslada a Ceuta y Melilla. Nicolás Castellano acompaña estas fotos con un texto combativo que recuerda la vulneración de los derechos humanos que sigue en marcha en esta puerta entre África y Europa.

 Sur

Ricard G. Vilanova
Para entender el aumento de llegadas a Europa en 2015, hay que entender Libia. ¿Quién mejor para enseñárnosla que el fotoperiodista Ricard G. Vilanova? Entramos en centros de detención y vemos a los maltratados subsaharianos antes de partir a Europa. Laura J. Varo escribe líneas evocadoras en los márgenes de las fotos de Ricard.

Centro

Rescate en el Mediterráneo, a unas decenas de millas náuticas de Libia.Anna Surinyach
 En el Mediterráneo abierto, cerca de las playas de Libia, está Anna Surinyach, a bordo del Dignity I, barco de rescate de Médicos Sin Fronteras. Lejos de centrarse solo en el dolor, Surinyach viaja con los refugiados y migrantes, cuenta qué pasa antes y después del rescate, humaniza todo lo que mira. En sus fotografías se iluminan el descanso, el silencio, la incertidumbre... Es la mejor forma de contar su condición de seres humanos.

Este

Una barcaza en el Egeo retratada por Santi Palacios. Es una de las fotografías que más llama la atención del público.Rania Slim / Photon
 Ha sido la frontera más caliente en los últimos meses. Santi Palacios la conoce como nadie. Desde Lesbos, el fotógrafo nos indigna con su cruda mirada a la tragedia de los naufragios y de la llegada de refugiados a las islas griegas. Andrés Mourenza, que ha desarrollado buena parte de su vida profesional en Grecia, va más allá de la actualidad y explica los orígenes de esa ruta.

Norte

Una familia de refugiados salta la valla de una autopista en Roszke (Hungría). Olmo Calvo
 En septiembre publicamos en 5W unas fotos de Olmo Calvo que aún son vigentes. Los bloqueos se mueven, la ruta es fluida: Hungría, Serbia-Croacia... y ahora la frontera entre Grecia y Macedonia. Calvo retrata los resultados de la descoordinación y la falta de solidaridad de los países europeos. Escribe Mikel Ayestaran, que estuvo en los primeros momentos del paso de refugiados en tren por Macedonia, en verano de 2015.

¿Para qué sirve todo esto?Esta exposición da un paso atrás para contextualizar los límites de esa fortaleza europea que sigue en construcción. Es un ejercicio didáctico: queremos explicar cosas al público. Son imágenes que seguirán de actualidad. Quizá en unos meses, en lugar de Lesbos o Idomeni, estemos hablando (otra vez) de la salida de barcazas de Libia o de nuevos bloqueos en los Balcanes.

No entraremos ahora en el manido debate sobre la foto de Alan Kurdi, pero no se puede negar que estamos inundados de imágenes. Se ha puesto en duda el poder del (foto)periodismo ya no para cambiar las cosas, sino solo para enseñar el dolor de los refugiados. Hay impactos emocionales, olas de rabia, no un relato.

Santi Palacios
   No tenemos las respuestas, pero sí sugerencias. En la exposición, hay una fotografía de Santi Palacios en Lesbos de la llegada de un padre y sus hijos a las playas griegas, envueltos en mantas térmicas doradas. Durante la inauguración en Valencia, vi a un padre con su hija en brazos observando durante un buen rato esta fotografía. Era un espejo. Parecía que se podían tocar. No había cambiado nada en el mundo, pero, quizá, algo había cambiado dentro de un padre y su hija en este lado de la frontera.


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