El filósofo Jristos Yanarás: "La sociedad griega ha sido humillada salvaje e irreparablemente"

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Jristos Yanarás (o si prefiere Christos Yannaras, como suele aparecer su nombre en las publicaciones internacionales) es el filósofo más importante que tiene Grecia en la actualidad. Académico, profesor universitario de filosofía y de teología además de escritor y columnista del diario Kathimerini -el rotativo más prestigioso del país-, este ateniense estudió Letras y Humanidades en la Universidad de la Sorbona en París y después Teología ortodoxa en la Universidad Aristóteles de Salónica. 

Con una larga trayectoria académica a sus espaldas, una apabullante producción de ensayos filosóficos y numerosos artículos de opinión publicados en periódicos y revistas, a sus 84 años Yanarás está considerado uno de los pensadores contemporáneos griegos más importantes. Contra la religión, El enigma del mal, Metafísica postmoderna y Ortodoxia y Occidente son los títulos de algunos de sus libros.

Como filósofo, ¿cómo ve la sociedad griega actual?

Me atrevería a decir que somos una sociedad en decadencia. La destrucción financiera que hemos sufrido y la incapacidad de reaccionar con reformas institucionales para la reorganización de la sociedad y el estado son pruebas convincentes de que los griegos no estamos en una crisis prolongada, sino en un proceso de decadencia. 

 

¿Qué efectos ha tenido la crisis económica en valores como la dignidad, el auto respeto, la solidaridad, la felicidad o la unidad?

Ha habido algunas reacciones de autodefensa de un grado impresionante y con resultados considerables; por ejemplo, la caridad organizada por la Iglesia. La familia griega ha demostrado su cohesión solidaria: muchas familias, algunas de las cuales con muchos miembros, han sobrevivido y aún lo hacen gracias a la pensión o al salario de un solo miembro. Sin embargo, no ha habido reacciones que persigan el despertar de las dinámicas sociales de desobediencia al totalitarismo actual de las prioridades financieras. 

 

¿La crisis ha cambiado a Grecia y a los griegos?

Sí, el pueblo griego y la sociedad griega han cambiado en gran medida debido a la catástrofe financiera. Ha habido un notable aumento del sentimiento de inseguridad colectiva, así como del sentimiento de rechazo a los políticos del país. También ha sido desalentador comprobar la obvia subordinación de las políticas de la UE a las conveniencias e intereses del sistema financiero internacional. Grecia ha perdido su independencia estatal: es un país bajo vigilancia en el que los inspectores de los "acreedores" "patrullan" todos los ministerios, bancos y organizaciones públicas. Grecia ha sido obligada a hipotecar durante 99 años todos sus "objetos de valor": bienes arqueológicos, bellezas naturales, todas sus infraestructuras productivas... La sociedad griega ha sido humillada salvaje e irreparablemente. 

 

¿Cómo le parece que ha manejado Europa la crisis griega?

Mi opinión -posiblemente incorrecta- es que la UE ha manejado la crisis griega con los criterios del materialismo histórico estricto. ¿Por qué los bancos franceses y alemanes prestaban a los griegos cantidades vertiginosas de dinero, sabiendo que sería imposible para ellos pagar una deuda tan escandalosa? ¿Cuáles fueron sus criterios de "cohesión europea"? ¿Cuál fue el papel de "regulador" que desempeñó el Banco Central Europeo? 

 

¿Qué lecciones enseña la crisis griega al resto del mundo?

Creo que la lección que hay que sacar de la crisis griega es obvia también para las otras crisis financieras en los países europeos: Europa necesita -y no parece haber encontrado- un antídoto , una solución alternativa, al materialismo histórico. La primera de las dos caras del materialismo histórico era el marxismo, que se derrumbó de forma violenta y humillante en la década de los noventa. Su segunda cara, el capitalismo (la "libertad" de los mercados), ha comenzado a mostrar signos de estar en un callejón sin salida, de contradicciones y de una inhumanidad despiadada, pero no de colapso. Un colapso repentino sería probable a causa de algún "error fatal" en las organizaciones financieras que funcionan con la lógica de apostar. 

 

Grecia ya no está bajo el control de la troika (el 'triunvirato' formado por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional). ¿Significa eso que ha salido de la crisis?

Por supuesto que no. Los bancos aún no están llevando a cabo sus funciones financieras, el desempleo se mantiene en niveles de pesadilla, los absurdos niveles de impuestos impiden cualquier dinámica de desarrollo. Un importante número de profesiones se ha extinguido (o funciona ilegalmente) debido a los excesivos impuestos. 

 

¿Qué precio ha pagado el pueblo griego por la crisis económica?

En mi opinión, el precio más alto es la expatriación de la fuerza laboral productiva del país. Al menos 300.000 o 400.000 jóvenes griegos con títulos de las más altas instituciones educativas han emigrado y buscan hacer carrera fuera de su país. Un segundo costo, a mi juicio, también muy pesado, es el sentimiento psicológico de frustración y desesperación que asola a la sociedad griega: para los jóvenes griegos, el horizonte profesional está clausurado, mientras que los mayores experimentan la insoportable amargura de la injusticia: la calidad de su trabajo y sus dones creativos no es valorada. 

 

¿Las medidas de austeridad eran inevitables o se podía haber afrontado la crisis griega de otro modo?

Yo no soy un especialista en finanzas, pero me preocupan ciertos hechos innegables: por ejemplo, las mismas personas y partidos políticos que han llevado a este país a la crisis -a través de préstamos escandalosos al estado o de la forma en que se manejó la compra de bonos del estado griego por parte de bancos alemanes y franceses- han continuado administrando la economía griega, incluso cuando el país estaba bajo la vigilancia de los acreedores. Las diferencias ideológicas entre ellos han desaparecido, personas que solían ser oponentes implacables han sido parte del mismo gobierno. Este hecho es muy revelador. 

 

¿Qué balance hace de los cuatro años de gobierno de Alexis Tsipras?

Alexis Tsipras permanecerá en la memoria histórica como un caso típico de firme inconsistencia política. Siendo muy joven fue designado líder no de un partido de izquierdas con matices socialistas, sino de la izquierda que aspiraba a ser "radical". Con un 62% de los votos, nuestro pueblo le dio el mandato de negociar la salida de Grecia de la zona euro. Sin embargo, optó por ignorar el referéndum y someter a Grecia a los juegos de los "mercados" con un celo que siempre es característico del sumiso. Constituye un caso simbólico de abandono de principios y creencias en nombre del poder. 

 

Las encuestas, así como el resultado de las elecciones europeas y municipales celebradas en Grecia en mayo pasado, muestran que Syriza (el partido que lidera Alexis Tsipras) ha perdido muchísimos votos. ¿Qué análisis hace al respecto?

Creo que el análisis político de los resultados de las elecciones es arriesgado a día de hoy. Porque la mayoría de los votantes no vota por posiciones políticas, programas, actos, planes, políticas, metas sociales. Votan por "impresiones". Usted sabe mejor que yo que las elecciones las ganan los creadores de opinión: los publicistas, los directores de fotografía, los lemas imaginativos, los eslóganes brillantes, el estilo, el "aura" del candidato, los gestos... Alexis Tsipras tiene carisma para ganar por impresiones. Su discurso es políticamente débil y exiguo, sin preocupaciones ni objetivos sociales. Sin embargo, gana impresiones. 

 

Muchos sondeos predicen que Kyriakos Mitsotakis, líder del partido conservador Nueva Democracia, será el Nuevo primer ministro de Grecia tras las elecciones generales. ¿Qué espera de él?

Para ser honesto, nada. Es un mediocre simpático. Cuando trata de mostrar su carisma como líder, da risa. Cuando intenta un análisis político, queda en evidencia. Su modelo es Tsipras; su aspiración, convertirse en el anti-Tsipras. Nunca ha hablado de reformas institucionales, objetivos sociales, avances audaces.... Es imposible para él librarse de la prioridad de la impresión. 

 

¿Cómo se imagina Grecia dentro de diez años?

La sociedad griega presenta una paradoja histórica. Durante muchos siglos, la Historia avanza no gracias a los logros del estado, sino a los avances de un puñado de personas -poetas, artistas, pensadores- que continúan con la particularidad de la antigua Grecia en términos contemporáneos. Como estado-nación, el helenismo constituye un fracaso desgarrador, un caso absurdo. Sin embargo, este fracaso institucional engendra una asombrosa cantidad de personas desmarcadas que continúan con esa antigua sorpresa. Somos contemporáneos de Tsipras y de Mitsotakis, sí. Pero somos igualmente contemporáneos de Mános Hatzidákis, de Seferis, de Elýtis, de Tsarouchis, de Mikis Theodorakis... Y esa continuidad sólo está amenazada por la destrucción de nuestro lenguaje.

 

Fuente: https://www.elmundo.es/papel/cultura/2019/07/06/5d1de78cfdddff9db08b460c.html