Contra la Impunidad del Franquismo |
En Francia, los atentados contra los oficiales alemanes eran cada vez más frecuentes y las principales vías de comunicación sufrían constantes sabotajes. En represalia, fusilaron a numerosos presos judíos o comunistas, pero ni siquiera las amenazas de ejecutar a doce presos por cada alemán atacado hacían disminuir el número de acciones del ocupante. Tampoco servían de nada los llamamientos al orden del mariscal Pétain, que, en su afán por demostrar su soberanía respecto al Tercer Reich, aplicaba medidas de represión aún más severas.
Lluís Companys cuando Pedro Urraca le entrega en Hendaya |
La maquinaria de persecución ya estaba bien rodada en toda Francia y, a partir de noviembre de 1941, el Gobierno franquista quiso montar redes de vigilancia similares en los Países Bajos y en Bélgica, donde también se ocultaban numerosos españoles que habían huido de Francia, por lo que la colaboración con la Gestapo era imprescindible. El SS Sturmbannführer Karl Bömelburg, responsable de la Gestapo en París, consideró que las nuevas competencias del agente Pedro Urraca le ofrecían una buena oportunidad de obtener más información y le integró en el servicio del Ernst von Alisch. Para el nuevo agente E-8001, alias "Unamuno", todo eran ventajas, no solo en el aspecto laboral, puesto que podría cotejar sus fichas con las de la Gestapo, sino también desde el punto de vista personal.......
Entre hienas
Loreto Urraca Luque
No hay comentarios:
Publicar un comentario