La revista estadounidense ha elegido a mujeres denunciantes de
violencia sexual, y algunos hombres, como la "Persona del año" en su
famoso reconocimiento
En su portada, la publicación ha elegido una representación de estas denunciantes: Ashley Judd, Susan Fowler, Adama Iwu, Taylor Swift e Isabel Pascual
"Para empujarnos a todos a dejar de aceptar lo inaceptable, las Silence Breakers son la Persona del Año 2017", sostienen sus responsables
Ejemplos de 'Silence Breakers'
La cantante Taylor Swift denunció al DJ David Mueller, que la metió
mano bajo la falda. "Pensé que si él fue lo suficientemente descarado
como para agredirme", "imagina lo que podría hacerle a un artista joven y
vulnerable si tuviera la oportunidad", argumentó Swift sobre sus motivos para denunciarle ante la justicia.
En su portada, la publicación ha elegido una representación de estas denunciantes: Ashley Judd, Susan Fowler, Adama Iwu, Taylor Swift e Isabel Pascual
"Para empujarnos a todos a dejar de aceptar lo inaceptable, las Silence Breakers son la Persona del Año 2017", sostienen sus responsables
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| Portada de la revista TIME de la persona del año 2017. |
Premio a las que rompieron el silencio. La revista
estadounidense Time ha dado su reconocimiento de "Persona del año" de
este 2017 a las mujeres, y algunos hombres, denunciantes de acoso y
abuso sexual.
El año en el que decenas de mujeres se rebelaron públicamente contra los abusos machistas,
muchas impulsadas por el aluvión de denuncias de acoso contra el
poderoso productor de Hollywood Harvey Weinstein, la publicación las
elige por provocar "uno de los movimientos de cambio social más rápidos
en décadas", destaca su editor Edward Felsenthal.
En su portada, la revista selecciona algunas de las mujeres que han
protagonizado estas denuncias. Entre ellas, la actriz Ashley Judd, una
de las primeras en denunciar al todopoderoso Weinstein. Judd logró
escapar del intento del productor de mantener relaciones sexuales con
ella en 1977, que ella rechazó, y tras ello contó lo sucedido. Denunció
ante sus conocidos el abuso de Weinstein y observó cómo su
comportamiento era un "secreto a voces" en la Meca del cine. "No había
un lugar para nosotras para denunciar estas experiencias", afirmó Judd a
Time.
Este 2017, muchas mujeres han encontrado ese "lugar" en
las redes sociales. El denominado movimiento #MeToo (#Amítambién, en
español) permitió a muchas víctimas de acoso y abusos sexuales compartir
su experiencia en público y encontrar el apoyo de muchos usuarios. Una
solidaridad inexistente en muchas ocasiones en este tipo de delitos, que a menudo permanecen ocultos por la presión que existe sobre las víctimas.
Ese movimiento en redes sociales, que recogía "actos individuales de
valentía", es reconocido ahora por la publicación con una selección de
mujeres relevantes que rompieron el silencio, al igual que Judd. Son
Susan Fowler, Adama Iwu, Taylor Swift e Isabel Pascual.
"La idea de que personas influyentes e inspiradoras moldeen el mundo no podría ser más adecuada este año", sostiene la revista: "Para empujarnos a todos a dejar de aceptar lo inaceptable, los Silence Breakers son la Persona del Año 2017".
Ejemplos de 'Silence Breakers'
La revista desglosa algunas de las historias de personas que, como
Judd, lucharon contra el silencio impuesto sobre los abusos sexuales.
Susan Fowler compartió en un blog personal las
experiencias de acoso que había vivido como ingeniera de Uber, lo que
acabó forzando una investigación de la compañía que acabó con 20 despidos.
Adama Iwu, por su parte, impulsó una carta abierta, que firmaron 147
mujeres, sobre el acoso sexual que sufren en California, que también
logró que se abriera una investigación sobre este tipo de violencia
machista. E Isabel Pascual es el pseudónimo que da nombre a una
recolectora de fresas que también padeció acoso sexual en el trabajo.
La revista también da voz al testimonio de acoso de algunos hombres. Es
el caso del joven director Blaise Godbe Lipman, que acusó a un agente
de agredirle sexualmente cuando tenía 18 años. Varios hombres han
denunciado también haber sido víctimas de abusos de jóvenes de personas
influyentes como el actor Kevin Spacey y el director de la Metropolitan Opera James Levine.
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