El partido lo ve claro: que no aparezca Marihuano por el Congreso, que nos la lían parda. Votad todos, que somos absolutos, y a otra cosa. Hete aquí que por la tarde estaba el presidente en el Senado, y al salir, una legión de periodistas hizo enjambre a su alrededor. Cuando parecía que iba a hablar, se dio la vuelta. Luego, volvió para hablar. Otra vuelta, y otra: huida por el garaje sin abrir el pico. #CorreMarianoCorre...
Mientras, la Condesa consorte de Murillo, alias Esperanza Aguirre, sube un 11% el transporte en Madrid. La liberal obliga a echar cuentas a los clientes (antes llamados viajeros): si son cinco estaciones, no sube. Si son de seis a diez, a pagar 10 céntimos por cada una, si son más de diez, deberemos aflojar 2 euros, y cuenta cuadrada. Ni pa tí, ni pa mí. Todo para ella, que cada día está más joven.
En el Norte, un pelotazo de la policía hería de muerte a Íñigo Cabacas el Viernes Santo, día 6. Dos días después, el pelotazo iba desapareciendo por las noticias y se hablaba de "incidentes". Ha tenido que salir el resultado de la autopsia para confirmar la realidad, y hemos de agradecerle al señor forense que diga la verdad. ¿Dimitirá alguien? ¿Pasará algo? No sabemos.
Tampoco sabemos el final de ese juicio por tirar tartas a la Excma. Presidenta de Navarra, por el que los acusados se enfrentan a penas de entre 4 y 10 años de prisión. Esta es la justicia, que funciona a veces, otras muchas no, y otras se juzga a los jueces que quieren enjuiciar delitos, corrupciones y hasta genocidios; cuidado, no hagamos sentadas ni protestas. Desde hoy, todo eso serán "actos criminales".
Pero si hay algo que de verdad ha conmovido a nuestro amado Reino Bananero es que el infante Don Froilán se ha herido en un pie jugando a las escopetas. Algo que, según su mamá, la Infantísima Doña Elena, "pasa siempre cuando hay niños". De toda la vida de Dios.
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